Aloha!!
Como os prometí, este puente íbamos a tener ración doble de blog, así que aquí
estoy de nuevo para hablaros de mis lecturas del mes pasado, de cuya calidad no
me puedo quejar. No sé si es que soy demasiado benevolente con las notas o
tengo la pasmosa habilidad de elegir bien lo que leo, y así casi siempre
acierto…
Momo, de Michael Ende
Un clásico infantil que debemos incluir en la lista de «libros
que nos leímos de pequeños pero que entendemos siendo adultos». La pequeña Momo
tiene el nada desdeñable don de saber escuchar, y eso saca lo mejor (y, a
veces, también lo peor) de la gente. Ya con ese dato sabemos que es ficción y
que no puede estar basado en hechos reales, pero eso no quita para que la
historia sea una lección de compañerismo y una oda a la amistad.
Entre tonos de gris, de Ruta Sepetys
Escrito en forma de memoria, se trata también de ficción,
pero está basada en hechos reales: los campos de concentración (o gulags) en
que los soviéticos confinaban a quienes consideraban enemigos del gobierno. Una
historia cruda en la que hay sitio para la esperanza, Lina y su familia nos
enseñan lo mejor y lo peor del ser humano.
Los restos del día, de Kazuo Ishiguro
Es la primera vez que leo a este autor y la verdad es que me ha sorprendido
gratamente. Tiene una forma de escribir bastante densa (mucha narración y
pensamiento interno, y poco diálogo) pero en este caso eso no significa que se
haga pesado. En este libro un mayordomo nos habla de su trabajo, de su pasado y
de su presente, mientras hace un viaje para reencontrarse con una antigua
compañera. Es muy interesante entrar en su mente y deducir la realidad sabiendo
sólo su punto de vista.
La carretera, de Cormac McCarthy
Se considera un clásico dentro de la ciencia ficción. Es una
distopía en la que un hombre y su hijo viajan hacia el sur siguiendo una
carretera. En el camino les pasan varias peripecias y tienen que decidir cómo actuar
ante ellas. No se puede decir que sea una historia bonita, porque a lo largo de
todo el libro se nota el desasosiego y el cansancio de los personajes, en mi
caso me dejo llevar bastante por las emociones de lo que estoy leyendo, así que
mientras lo leía tenía la sensación de estar en la cama con gripe, sin poder
respirar bien y con un estado mental aletargado.
Segundas oportunidades, de Rainbow Rowell
Segundo libro que leo de la autora, y no me ha decepcionado.
Es tan mona escribiendo… no sé cómo explicarlo. Es como que si la tuviera
delante me darían ganas de pellizcarle las mejillas y darle las gracias por ser
tan cuqui. Y por hacer que sus personajes sean también cuquis. Y sus historias.
En Goodreads no tiene muy buena nota y me da rabia, porque no creo que este
libro baje el nivel de los demás que haya escrito, simplemente tiene una
historia un poco diferente. No sé, será que cada uno entendemos una cosa
distinta, es la magia de la lectura.
La música del silencio, de Patrick Rothfuss
Y las 5 plumas del mes se la lleva Rothfuss.
Me resistí a leer esta historieta, no porque no me gustara
el personaje (a quien le cogí mucho cariño en El nombre del viento), sino porque, al saber que no era una parte
trascendente de la historia, me daba pereza. No quiero decir que no sea
importante ahondar en un personaje secundario, sino que, por lo que había leído
al respecto, sabía que no ocurrían avances en los acontecimientos. Y no sé si
decir que me alegro de haber esperado tanto, ya que podría haberla disfrutado
mucho antes, pero la verdad es que no me arrepiento del momento en que la he
leído, porque me ha venido muy bien. Es increíble todo lo que se puede aprender
sobre una persona solamente observándola, sin que ella hable de sí misma.
Y eso es todo, amigos. Si las cosas siguen su curso nos
volveremos a leer el domingo que viene. Hasta entonces, felices lecturas! ©